Descubre tu método de estudio ideal

by - marzo 02, 2019




Tu método de estudio ideal sólo podrías encontrarlo por ti misma, pero yo hoy intentaré hacerte la tarea más fácil.

Esa misión puede ser algo angustiante pero no tiene por qué, en realidad es hasta divertido descubrirlo porque luego de conocerte y saberlo todo fluye como el agua.

El resultado de conocer tu método de estudio ideal sería lograr un aprendizaje significativo, es decir, interiorizar la información para tenerla disponible a pesar de que pase el tiempo.

Hay materias o temas específicos que queremos o necesitamos memorizar a corto pero hay otras en las que debemos aprender de verdad y recordar lo que aprendamos por mucho más tiempo. En esta ocasión voy a buscar es ayudarte justamente a eso, que la información que tu cerebro reciba se quede habitando más de unos cuantos días un espacio en tu cerebro y que tú logres encontrar tu método de estudio ideal según las siguientes recomendaciones básicas.


Vamo' a ello...



1.
Organiza tu estudio según tu tiempo disponible


Con "tiempo disponible" me refiero a las horas que sabes que puedes destinar a estudiar y organizar tus actividades según esa disponibilidad.

El secreto de esto es la gestión de tareas porque el tiempo no se puede gestionar.

Un día tiene 24 horas y por más que queramos no va a tener ni una más. Además, si lo pensamos bien, seguro así las tuviera seguiríamos pensando que no nos es suficiente, entonces ni siquiera tiene sentido.

Si tienes un día entero, por ejemplo un domingo donde de las 24h duermes 8h, te quedan disponibles 16.


¡Pero ojo! No pienses que tienes 16h para estudiar porque eso no es cierto, también hay que comer y descansar.


Si estudias 16h no sería raro que termines frita y ahogándote en la ansiedad. 

Lo que puedes hacer es armar 3 o 4 bloques de 2h y así repartir las actividades, o utilizar el método pomodoro para concentrarte por bloques más cortos de tiempo.


2.
Conoce tus horas de más productividad

Por ejemplo, yo te estoy escribiendo esta entrada a las 5:30 de la mañana un lunes.

¿KHÁ KHÁAAAAA?

Jajajajajaja, si amiga, leíste bien. Te estoy escribiendo a esa hora porque conozco mi funcionamiento y rendimiento mental y tú deberías conocer el tuyo.

Observa tus comportamiento e identifica si te concentras más en la mañana o en la noche y según eso estableces los bloques de estudio.

No tiene sentido que hagas tareas que requieren demasiada concentración en un espacio del día en el que ya solo piensas en comer o en dormir.

¡Gestión inteligente de tareas amiga, gestión inteligente de tareas!


3.
Descansa, descansa, descansa

¿Recuerdas que más arriba te decía que no cuentes con tener 16h disponibles para estudiar? Es por esto.


Hay que descansar, y así no lo creas puede llegar a ser más importante que estudiar.


Yo sé que cuando tienes mucho estudio pendiente cuesta aceptar que debes descansar porque mientras lo haces solo piensas "debería estar estudiando, debería estar estudiando" en un loop constante que te mata de ansiedad.

Pero el descanso es ese tiempo trascendental que le das a tu cerebro para recargar las pilas y luego seguir con motivación y ganas.

¿No te ha pasado que luego de algunas horas de estudio efectivo ya no quiere leer ni un renglón más? Eso es un signo turbo diciente de que tienes que descansar ¡Tu cerebro te lo está pidiendo a gritos!

Si no paras es probable que en ese punto ya no logres ninguna retentiva de la información que leas o escribas, entonces ¿para qué seguir si es improductivo?

Si se te dificulta disfrutar de los espacios de descanso lo que podrías hacer es crear o buscar una lista de cosas que quisieras hacer para desconectarte del estudio en ese tiempo y tenerla a la mano para no tener que pensar demasiado qué hacer y poder disfrutar de esas cosas en vez de angustiarte más por no saber cómo descansar.

4. 
No faltes a una clase por estudiar para otra

Yo sé que sabes que esto está mal, pero entonces dime, ¿por qué lo sigues haciendo?

Como bien dicen aquí en Colombia eso es "abrir un hueco para tapar otro".

Si por alguna razón no organizaste bien tu tiempo, mañana es el examen y sabes que ya estás colgada en estudios lo que menos te recomiendo es dejar de ir a una clase para estudiar y peor si además piensas no dormir absolutamente nada.

Incluso si esa clase es aburrida, debes sobrevivir a ella (con estos consejos) e ir. No sólo porque la información de esa clase sólo la vas a recibir en ese momento, sino porque al cerebro le cae bien dispersarse y ya tendrás tiempo para dedicarte 100% al estudio.


Recuerda que es mejor estudiar 2 o 3h en calma que 8h pero llena de ansiedad.


5. No estudies un día antes

Sé que puede sonarte obvio pero mi experiencia y mi existencia en la Universidad me ha demostrado que sigue siendo importante y pertinente mencionarte este consejo.

Entiendo, es tentador y en muchas ocasiones nos sentimos obligadas a hacerlo porque el fin de semana o días antes del examen pasamos el tiempo fue haciendo mil cosas que no debíamos porque queríamos evitar el estudio de ese tema enorme y angustiante.

Pero sin duda no es lo mejor que puedes hacer por ti y tu aprendizaje.

Si lo haces le estás pidiendo demasiado a tu cerebro, que si bien es casi mágico y consigue cosas que nos sorprenden, es muy probable que luego de embutirte toda la información de fechas, dosis, nombres de personas, o cualquier cosa un día antes del examen llegues a presentarlo llena de confusión y hasta puedes equivocarte contestando las preguntas más fáciles por falta de seguridad.


Por eso te digo: amiga, date cuenta. No te satures.


Y recuerda que el cerebro aprende mejor de forma progresiva. Así que intenta estar de su bando y hacerle la tarea más fácil.


6. Aprende de tus errores


Aunque es lo último que te menciono, este puede ser el paso más importante de todos. Si no modificas las acciones que no te generaron ningún beneficio ¿cómo esperas lograr otros resultados?.

Si olvidaste cosas por la ansiedad y los nervios, si descubriste que eso que piensas "esto no lo preguntan" ¡Siempre lo preguntan!, si viste que ni faltar a clase ni no dormir funcionó, si cualquier cosa no salió bien: aprende de ello y cámbialo para la próxima.

Estudiar y conocer nuestras formas de aprendizaje es un proceso que toma algo de tiempo.

Lastimosamente nadie nos ayuda a entender cómo aprendemos y nos toca descubrirlo a la maldita sea, pero lo importante es que nunca es tarde y una vez te conoces, ya coges el tiro y vas mucho más segura.



Si tienes algún consejo más que quieras compartir puedes dejarlo en los comentarios y si tienes dudas sobre algo puedes escribirme por cualquiera de mis redes sociales.

Si en tu vida de estudiante se acercan los exámenes te mando todo el ánimo y el apoyo del mundo, y recuerda que nadie puede aprender por ti así que esa tarea es tuya, pero si te comprometes nada te va a quedar grande.


Un abrazo.


    - Alejandra.

Photo by Plush Design Studio on Unsplash 

You May Also Like

0 comentarios